Nueve excelentes razones, por tanto, para refrigerar con Marel.
Razón 1. Sostenibilidad
En un mundo que se calienta, debemos vigilar el uso de la energía y el agua. Cada instalación de refrigeración por aire de Marel se construye a medida, logrando el mejor equilibrio posible entre la huella y el uso de energía sin que afecte al rendimiento ni la presentación del producto. La combinación de la capacidad horaria, el peso del producto, la temperatura central deseada y el espacio disponible dictarán el tamaño de la huella.
Los consumos de energía más bajos y una calidad del producto cada vez mejor son las prioridades de la investigación y desarrollo de Marel. Lo ideal es crear el mejor entorno de refrigeración posible y con un menor consumo de energía alrededor de cada carcasa individual.
Razón 2. Óptimo periodo de conservación
Prácticamente en todos los mercados, existe la obligación legal de refrigerar los productos inmediatamente después de la evisceración, para evitar la proliferación de bacterias nocivas, aunque la temperatura puede variar.
Tanto los procesadores como sus clientes quieren un periodo de conservación óptimo. Esto está impulsando una tendencia hacia temperaturas más bajas. En muchos mercados, las temperaturas centrales deberán estar ahora lo más cerca posible del punto de congelación. Esto presenta un desafío porque, cuanto más baja es la temperatura, mayor es el riesgo de que se congelen las partes finas, como las alas y los colgajos del cuello.
Los especialistas de Marel tienen una experiencia inigualable en el diseño de instalaciones de refrigeración por aire. Siempre garantizarán la temperatura central acordada sin que se congele ninguna parte.