La circulación de aceite más rápida para una fritura rápida y uniforme
Cuando se crean productos precocinados, a menudo se utiliza un proceso de fritura para fijar la capa de cobertura. Las freidoras de Marel ofrecen la mayor velocidad de circulación de aceite del sector. Esto garantiza un entorno de fritura muy estable y una transferencia ideal del calor a los productos, para obtener la máxima consistencia del producto.
Además, gracias a la alta circulación de aceite, las freidoras de Marel requieren temperaturas más bajas en comparación con otras freidoras. Esto se traduce en un menor consumo de energía, lo que puede suponer un ahorro considerable en los costes. Mark Boom, especialista en productos precocinados de Marel, explica: “En las freidoras industriales típicas, los elementos calefactores tienen que alcanzar 280-300 °C (536-572 °F) para llevar el aceite a la temperatura de proceso correcta. Sin embargo, las freidoras de Marel pueden conseguirlo con el elemento calefactor a una temperatura más baja, por ejemplo, alrededor de solo 260 °C (500 °F)”. El aceite de cocina pasa menos tiempo en contacto directo con la resistencia y se calienta de manera uniforme, por lo que alcanza la temperatura adecuada rápidamente y sin sobrecalentarse.
Filtración de máximo nivel para un aceite de alta calidad
La calidad de sus productos depende en gran medida de la calidad del aceite en el que se fríen. La calidad del aceite se degrada irreversiblemente cuando se expone a altas temperaturas y a los restos que se desprenden del producto durante la cocción. Un sistema de fritura sofisticado puede ralentizar considerablemente la degradación del aceite, por lo que los procesadores pueden aprovechar las numerosas ventajas de un aceite más duradero y de mayor calidad. La temperatura del aceite y la filtración son los factores clave para mantener la calidad del aceite, y la tecnología de Marel optimiza ambos.
Las freidoras industriales pueden equiparse con diversos sistemas de filtración para mantener el aceite lo más puro posible. Boom explica: “Como norma, el aceite que circula por una freidora industrial se filtra mediante un filtro interno colocado al final de la freidora, donde se eliminan las partículas más grandes. Sin embargo, al añadir un filtro externo, se pueden eliminar del aceite aún más partículas y de menor tamaño”. En definitiva, la tecnología de fritura y filtración de Marel significa que los procesadores pueden tener la máxima confianza en que sus productos se cocinarán al más alto nivel y de una manera más rentable y sostenible.
Consistencia: hacer las cosas bien siempre
En Marel, entendemos que es fundamental alcanzar la máxima consistencia del producto. Los consumidores establecen requisitos elevados para los productos que consumen. Quieren poder pedir o comprar productos con las mismas características cada vez. Por ello, los productos listos para el consumo deben cumplir las estrictas especificaciones de productos que establecen los clientes en el sector minorista o en el servicio de alimentación. Los productos finales deben ser consistentes en peso, dimensiones, color y aspecto general. Para cumplir con estas especificaciones, es esencial contar con un proceso de producción consistente y controlado, día tras día.