Descargadora Selectiva de Patas
En algunos países está prohibido procesar patas de grado inferior junto con las destinadas al consumo humano. La tecnología de descarga selectiva debe eliminar las patas rechazadas antes del proceso de escaldado de las patas. La Descargadora Selectiva de Patas de Marel hace precisamente esto. Toma información de una estación de inspección veterinaria y/o cámara y automáticamente desengancha cada pata de grado bajo en un carrusel de descarga.
Rechazo veterinario
Supongamos que la estación veterinaria rechaza una carcasa. Los sensores y el software de rastreo permiten el llamado 'seguimiento de las patas'. El sistema registra el gancho del que se ha retirado la carcasa y localiza el gancho correspondiente con las patas. La Descargadora Selectiva de Patas recibe entonces una señal para retirar las dos patas de ese gancho.
Lesiones en las patas
Para detectar lesiones antes del escaldado, Marel utiliza una cámara, instalada en la línea de las patas después de la unidad de transferencia entre el desplumado y la evisceración. Esto escanea las patas en el gancho. La cámara de alta resolución evalúa cada pata por separado e individualmente. Es verdaderamente objetivo, sin intervención humana. Si detecta una lesión, envía una señal a la descargadora selectiva de patas para retirar la pata. La descargadora retira esa pata y esa pata sola del gancho de sacrificio.
Descarga precisa
Los ganchos con todas las patas entran en el carrusel de 20 unidades montado en el conocido armazón Marel RS. Aquí es donde se descargan las patas con lesiones y las patas de las carcasas rechazadas por un veterinario. La Descargadora Selectiva de Patas Marel funciona con precisión y con tolerancias muy estrictas.