Marel: automatización única en el procesamiento primario de cerdo

La automatización es un tema de gran actualidad en la industria de la carne. Se trata de utilizar equipos automáticos para facilitar o eliminar las tareas manuales de cualquier proceso de la cadena de valor. Hoy más que nunca, la automatización es una cuestión que ocupa un lugar muy importante en la agenda de la mayoría de los procesadores de carne de cerdo, motivada en gran medida por sucesos como la peste porcina africana y la Covid 19. En la industria porcina, la automatización incluye a menudo la robótica para reducir la dependencia de la mano de obra.

Desde hace décadas, Marel ha suministrado lineas de sacrificio de cerdos, instalaciones de corte y de deshuesado y líneas de empaquetado para la venta minorista a la industria porcina. Como proveedor de línea completa, nuestros avanzados equipos de procesamiento de cerdo, sistemas y software abarcan toda la cadena de valor de la producción, desde la recepción de animales vivos hasta el envío de productos terminados. Esta automatización de vanguardia se ha convertido en un gran éxito, debido a las mejoras inmediatas de las condiciones de seguridad e higiene de los alimentos, así como a los menores requisitos de mantenimiento y al menor consumo de las piezas de recambio.

Rápidamente, la industria de procesamiento de la carne de cerdo está cambiando sus métodos, pasando de la manipulación manual tradicional a procesos automatizados basados en robots, y Marel está a la vanguardia del desarrollo de estas soluciones avanzadas. El desarrollo más reciente es M-Line, una nueva generación de automatización del procesamiento primario que utiliza robots con brazos articulados.

Falta de mano de obra

Si bien los seres humanos se están volviendo más vitales detrás del centro de mando, los robots automatizados se están encargando de un trabajo que cada vez es más difícil de realizar. La mano de obra de la industria de procesamiento primario es escasa, los costes de las materias primas aumentan y los salarios crecen en todo el mundo. Sin mencionar los impactos que la COVID-19 ha tenido sobre la salud y seguridad de los empleados, y el flujo de producción.

Entre otros aspectos, la automatización mediante robots reduce la dependencia de mano de obra calificada y aumenta el bienestar de los empleados. Además, al reducirse drásticamente la necesidad de mano de obra, prácticamente se eliminan los errores humanos, se mejora la precisión, se optimizan los procesos y se aumenta significativamente el rendimiento.

Automatización en el procesamiento primario

Hay quienes sostienen que la línea de procesamiento primario en una instalación de producción de carne de cerdo tiene los trabajos más exigentes físicamente. Se trata de tareas intensivas en la mano de obra que incluyen tirar, cortar y levantar reses pesados. Por ello, Marel ha desarrollado los robots M-Line, una gama de soluciones automatizadas de procesamiento primario que elimina la dependencia de la mano de obra utilizando la robótica y la tecnología 3D para realizar el trabajo de forma precisa, eficaz y sin perjudicar la calidad de la carne.

Gracias a la combinación de nuestra tecnología patentada TwinTool con un avanzado proceso de escaneado y una gran precisión de posicionamiento, los robots M-Line aumentan la capacidad de procesamiento y el rendimiento. Los procesadores de carne de cerdo pueden confiar en el sólido rendimiento de los robots industriales M-Line en entornos de producción complejos y muy exigentes. Además, se ha demostrado que M-Line reduce el número de empleados a tiempo completo.

La gama de robots M-Line se compone de la Pre-cutter y Belly Opener (MPB), la Bung Remover (MBR), la Splitting Saw (MSS), la Neck Cutter (MNC) y la Leaf Lard Remover (MLR). La combinación de escáneres 3D para cerdos, robots industriales y la innovadora tecnología TwinTool ha establecido un nuevo estándar en la automatización del procesamiento primario que ayuda a los procesadores a solucionar la falta de mano de obra, las ineficiencias de la línea y los errores humanos.

Las ventajas comprobadas de la gama M-Line incluyen:

• Reducción de mano de obra en el proceso primario

• Aumento de la seguridad alimentaria

• Mejora de la vida útil de los productos de cerdo frescos y refrigerados

• Optimización de línea

¿Quién necesita automatización?

Las soluciones automatizadas y robóticas son ideales para los procesadores de carne de cerdo que buscan optimizar la eficiencia de la línea, mejorar la uniformidad y mejorar la higiene a lo largo de su línea. La demanda de los consumidores sigue impulsando a los procesadores a producir alimentos en mayor cantidad y variedad, y no es ningún secreto que los procesos automatizados pueden realizar tareas de forma más rápida y precisa que sus homólogos manuales. Además, las inquietudes de seguridad relacionadas con los alimentos son mayores que nunca tras la pandemia y el hecho de minimizar el contacto y los errores humanos en el procesamiento puede tener importantes ventajas.

En un momento en que el sector del procesamiento de alimentos se ha enfrentado a uno de los desafíos de trabajo e higiene más significativos de la historia reciente, hay esperanzas de un futuro más seguro, eficaz y sostenible gracias a los equipos robóticos automatizados como los de M-Line.