En su discurso, el presidente de Frimesa, Valter Vanzella, destacó que el frigorífico, inaugurado en la fecha del 45 aniversario de la cooperativa, es el hito de una historia de superación de retos. Recordó que, en 2007, la cooperativa tenía una planta faenadora que faenaba 1.500 cerdos por mes y que hoy está entre las 50 marcas más recordadas por los consumidores brasileños.
“La nueva unidad fue construida con lo mejor en tecnología para atender los deseos de sus asociados”, informó el presidente Valter Vanzella, y agregó que se eligió la ubicación de la nueva planta, a 150 kilómetros de la sede, en Medianeira (Brasil), debido a la concentración de productores en la región. “Además de ser un motivo de gran orgullo para el cooperativismo brasileño, representa la fortaleza que tiene el sector para agregar cada vez más valor a la producción y, además, generar miles de nuevos empleos directos e indirectos”, afirmó.
Nuevo estándar para el mercado regional
Para el director de operaciones de ventas de Marel, Guus Heijnen, la planta inaugurada por Frimesa representa la definición de un nuevo estándar para el mercado latinoamericano y demuestra la capacidad de Marel como proveedor de línea completa. “Es el proyecto más grande de Marel en Latinoamérica, con las últimas innovaciones tecnológicas. Se llevó a cabo en cooperación con Frimesa, una cooperativa muy respetada en Brasil, pero también conocida a nivel mundial. Un hito en todos los aspectos”.
El director general de Marel en Latinoamérica, Clausius Nobrega, destaca que el Proyecto Assis Chateaubriand (Brasil) representa el esfuerzo y la integración de los equipos, de Latinoamérica y global, para traer las mejores soluciones disponibles de Marel para procesamiento inteligente y automatización de cerdos para Frimesa, combinado con soluciones avanzadas de gestión de datos y procesos, posibles gracias al Innova. “Representa nuestra misión, trabajar en sociedad con Frimesa, para transformar la forma en que se procesa la carne de cerdo, produciendo alimentos seguros y de alta calidad con la velocidad y el valor deseado por los consumidores”.
El director de ventas de Meat para la región de Latinoamérica, Fernando Roos, recuerda los desafíos que superó el equipo para cerrar negociaciones sobre el pedido de línea completa durante la pandemia de Covid-19 e informa con orgullo que este es un proyecto de referencia para Marel, a nivel mundial, por reunir prácticamente todas tecnologías actuales disponibles para el procesamiento primario y secundario de la carne de cerdo. Es la línea de procesamiento de carne de cerdo más grande de Latinoamérica, ya que podrá llegar a la fase 3 (duplicación de la línea de sacrificio y deshuesado) con una capacidad de procesamiento de 1.100 cerdos/hora. También cuenta con tecnologías innovadoras como el aturdimiento con CO², cinco robots en la línea de procesamiento primario, corte primario vertical automatizado con el sistema DeboFlex Primal Cut, deshuesado de jamones y paletas con el sistema de transporte vertical DeboFlex; cámaras de canales completamente mecanizadas y el software de control de producción y equipos (MES) Innova de Marel, que controla todo, desde la llegada de animales vivos hasta la salida de productos terminados del área industrializada.