Las innovaciones en el procesamiento de salmón permiten que los equipos no solo aumenten el rendimiento, la calidad y reduzcan la dependencia de mano de obra, sino que lo hagan utilizando menos agua y energía.
Puede resultar agotador escuchar constantemente que las presiones medioambientales van en aumento. En la industria del pescado, estas presiones se viven a diario: los costos de servicios públicos se disparan, reduciendo los márgenes de ganancia, mientras que las restricciones sobre el uso de agua y energía exigen replantear rápidamente las líneas de producción y las instalaciones.
Por otro lado, los avances tecnológicos están permitiendo a las empresas reducir el consumo de energía y agua, al mismo tiempo que maximizan el aprovechamiento de la materia prima. Promoviendo prácticas más sostenibles que, además, incrementan la rentabilidad.
Los equipos más recientes incorporan avances tecnológicos que responden a los desafíos de los procesadores de salmón. Las innovaciones presentes en la fileteadora MS 2750 integran el fileteado y el recorte automático en una sola unidad. El corte inteligente de la MS 2750 se adapta a las variaciones anatómicas naturales de cada pez sin necesidad de ajustes manuales, manteniendo un rendimiento constante de hasta 25 peces por minuto.
La precisión del fileteado mejora el rendimiento y, además, lo hace con menos agua y menos energía.
Potencia: 7 kW
Agua: 15 litros/minuto
Aire: 360 litros/minuto a 7–12 bar
Para los procesadores enfocados en la sostenibilidad, la MS 2750 ofrece un menor consumo de energía y agua durante la operación, así como un diseño modular y abierto que simplifica la limpieza a un alto nivel de higiene. En consecuencia, permite usar menos agua, menos energía y menos tiempo, obteniendo un producto final de mayor calidad.
La MS 2750 utiliza considerablemente menos agua, un factor determinante en los costos operativos. El agua es costosa en todo el mundo, pero especialmente donde escasea.
Larry Couch, Key Account Manager
JBT Marel
Las líneas de fileteado de salmón varían según los equipos utilizados y la cantidad de máquinas requeridas. Cuantas más máquinas haya, mayor será la necesidad de recursos tanto para la operación como para la limpieza. Si puede alcanzar la misma capacidad de producción con una máquina en lugar de dos, el consumo y los costos de agua y energía se reducen significativamente.
Al invertir en nuevos equipos, considere la automatización avanzada que mejora la precisión y proporciona mayor rendimiento del mismo pescado, lo que permite alcanzar el mismo resultado con menos equipos. Automatizar procesos integrados como el descabezado y el fileteado permite mayores volúmenes de producción y productos finales de mejor calidad. Con cada máquina trabajando de manera coordinada, se logra mayor precisión y menos desperdicio.
Al incorporar las soluciones adecuadas en las plantas de procesamiento, es posible operar con dos máquinas donde antes se necesitaban cuatro, reduciendo el uso de agua y energía simplemente porque hay la mitad de los equipos en funcionamiento. Y con un 50 % menos de máquinas que limpiar, se reducen aún más los costos de captación de agua dulce y de tratamiento de aguas residuales.
En el procesamiento de salmón, el agua y la energía están estrechamente vinculadas. El agua fluye por las tuberías, pero la energía se utiliza para calentarla, bombearla, filtrarla y desecharla. Cuando los equipos o las líneas de procesamiento son ineficientes y los ciclos de limpieza se prolongan porque los equipos son difíciles de sanitizar, se desperdician tanto agua como energía.
El monitoreo del consumo energético, del uso de agua y de la generación de residuos puede lograrse mediante equipos más avanzados, como la MS 2750, y también con sensores inteligentes. Contar con mediciones precisas de su planta le brinda la información necesaria para reducir desperdicios, costos y optimizar tanto las máquinas como las operaciones. Estos datos ayudan a detener los costos en cascada de energía, agua y residuos que afectan directamente la rentabilidad.
Las estadísticas indican que la industria pesquera destina alrededor del 13 % de sus ingresos al consumo energético. Reducir el uso de agua y energía es, por tanto, una forma evidente de enfrentar este gasto. Aunque los cambios ambientales representan una presión creciente para los procesadores de salmón, los equipos y tecnologías avanzadas ofrecen una forma de avanzar hacia el futuro con confianza: no solo reduciendo el consumo de recursos, sino también minimizando la dependencia de mano de obra, aumentando el rendimiento y mejorando la rentabilidad.
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